Esta receta es una de mis favoritas, por no decir que me dedicaría a alimentarme a base de esta tarta, para desayunar, para comer, para merendar....a todas horas, me encanta!!
Está muy esponjosa, sabrosa, nada empalagosa y aunque no sabe a zanahoria como tal, le da un sabor muy especial.
Vamos ya con los ingredientes.
Para el bizcocho :
- 200 gr de zanahoria
- 150 gr de harina
- 150 gr de azúcar
- 2 cucharaditas de levadura royal
- 3 huevos
- 100ml de aceite de girasol
- pizca de sal
- pizca de bicarbonato sódico
- 1 cucharadita de canela
Para la cobertura :
Yo lo hice a ojo para que no sobrara cobertura, pero más o menos...
- 200 gr de queso para untar ( philadelphia)
- 60gr azúcar glass
- chorrito de esencia de vainilla (opcional)
Preparación del bizcocho :
- Lavamos y pelamos las zanahorias y las rallamos bien finitas.
- En un bol echamos todos los ingredientes secos, mezclamos un poco y a continuación, añadimos los huevos, el aceite y volvemos a mezclar.
- Un ves este bien mezclado, añadimos la zanahoria rallada y mezclamos todo bien nuevamente.
(como veis en la foto lo hice al revés jaja, pero no pasa nada, aunque como os digo se mezcla más facilmente)
- Ponemos en un molde para bizcochos previamente enmantequillado y enharinado (podéis ponerle papel de horno para que sea más fácil de desmoldar) y lo metemos al horno precalentado a 180ºC durante unos 45 min.
- Sacamos y dejamos enfriar.
Preparación de la cobertura :
- En un bol mezclamos el queso de untar con el azúcar y la esencia de vainilla y con unas varillas eléctricas batimos hasta que quede todo bien mezclado y bien consistente.
- Lo reservamos en la nevera para que quede algo más durito, y cuando el bizcocho esté frío lo echamos por encima.
Al final podemos espolvorear canela molida para que quede más bonito.